Llegó a mis manos este poema el otro día que creo que muestra bastante bien eso de que la literatura es atemporal. Hace ya siglos que Juan de Tassis y Peralta, conde de Villamediana, escribió este soneto. Solo hace falta leerlo y poner la televisión o escuchar las noticias para ver que podemos aplicarlo a la actualidad:
en la estéril región de nuestros años,
que, premiada la culpa y los engaños,
el mérito se encoge escarnecido.
Ser un inútil anhelar perdido,
y natural remedio a los extraños,
avisar las ofensas con los daños
y haber de agradecer el ofendido.
Máquina de ambición, aplausos de ira,
donde sólo es verdad el justo miedo
del que percibe el daño y se retira.
Violenta adulación, mañoso enredo
en fe violada han puesto a la mentira
fuerza de ley y sombra de denuedo "
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